domingo, 25 de octubre de 2009

DIJO LA MADRE TERESA DE CALCUTA : " HAY QUE DAR HASTA QUE DUELA "......


Experiencia de una Jerarquía de la Luz encarnada.



Nunca olvidaré una experiencia que tuvimos hace algún tiempo en Calcuta.


Hacía meses que no teníamos azúcar, y un pequeño niño hindú, de cuatro años fue a su casa y le dijo a sus padres: " No voy a comer azúcar por tres días, le voy a dar mi azúcar a la Madre Teresa ".


Era tan poquito lo que trajo después de tres días; pero el suyo era una amor muy grande.


Es muy importante poder tener una vida de Paz, de Alegría, de Unidad. Para ello no creo que haya una ciencia más grande que el Amor por cada Ser Humano.


Debemos aprender, como ese niño pequeño, que no es cuánto damos sino cuanto Amor ponemos al DAR. Dios no espera cosas extraordinarias.


Después que recibí el Premio Nobel, mucha gente vino y dio; alimentaron a los nuestros, trajeron ropas, hicieron cosas hermosas. Una tarde encontré a un mendigo en la calle, vino hacia mi y me dijo: "MADRE TERESA, TODOS TE ESTÁN DANDO ALGO. YO TAMBIÉN QUIERO DARTE ALGO, PERO HOY, POR TODO EL DÍA SOLO TENGO DOS MONEDITAS Y QUIERO DARTE ESO".


No puedo contarles la alegría radiante de su rostro porque tomé esas dos moneditas sabiendo que si él no recibía hoy algo más, tendría que irse a dormir sin comer....pero sabiendo también que lo habría herido tanto si no las hubiera aceptado.


No les puedo describir la alegría y la expresión de Paz y de Amor de su cara. Solo puedo decirles una cosa: Al aceptar las dos moneditas sentí que era mucho más grande que el Premio Nobel, porque él me dio todo lo que poseía y lo hizo con tanta ternura.


Esta es la Grandeza del Amor. Tratemos de encontrar ese Amor y ponerlo en acción.


¿ Dónde está Dios ? Sabemos que Dios está en todas partes. En lo profundo de nuestros corazones todos tenemos ese deseo, esa llama quemante, ese anhelo de Amar a Dios. Pero: ¿ Cómo podemos Amar a Dios, a quién no vemos, si no lo amamos en los otros a quienes si vemos ? Cuando ustedes ven a una persona en la calle, ¿ Quién es ella para ustedes ? ¿ Su hermano, su hermana? La misma mano amorosa que los creó nos ha creado a todos.


Nosotros, las hermanas y yo, hemos visitado a personas que no tienen nada ni a nadie, personas a las que nadie necesita o ama, a quienes nadie cuida, y no solo en la India. En la India y en África tenemos gente hambrienta de pan, pero en América, Europa, y todos los lugares donde trabajan las hermanas, tienen hambre de Amor: de ser necesitado, de ser Amado, de ser alguien para otros. Alguna vez, en Londres o Nueva York, tomé la mano de alguien sentado en la calle. El tomó la mía y me dijo: " Oh, esta es la primera vez en muchos años que siento el calor de una mano. En tantos años, nadie tocó nunca mi mano. No he sentido un Amor Humano o el calor de una mano".....Jamás me olvidaré de ésto.


MADRE TERESA DE CALCUTA






PENSAMIENTOS DE LA MADRE TERESA DE CALCUTA






-No tengo tiempo para estadísticas, voy chico por chico y leproso por leproso.




-A los pobres no hay que compadecerlos, hay que querelos.




-¿ De dónde sacamos dinero para nuestra misión ? A veces mendigamos, otras veces Dios Provee.


-Dios tiene sus modos y medios.


-Podemos agotarnos hasta matarnos de trabajo, pero si nuestro trabajo no está entretejido de AMOR, entonces es inútil.


-Me he dado cuenta, cada vez más que el no ser QUERIDO es el peor mal que aflige a un Ser Humano.


-Si hacen su trabajo con Alegría, conducirán a mucha gente hacia Dios. La Alegría es Oración, un signo de nuestra generosidad visible en nuestros ojos, nuestros rostros, nuestras acciones.


-Señor, ayúdame a rociar tu fragancia por donde yo vaya. Ilumina mi alma de tu espíritu y vida.






Compartiendo Reflexiones




"Hay que Dar hasta que Duela ", es una de las frases más conocidas de la Madre Teresa de Calcuta y si la persona se detiene profundamente a meditar en ella, es posible que sienta una especie de sensación de molestia, como si algo se desgarrara o como si algo muy retenido tuviera que desprenderse de ella misma causando Dolor.


La Donación debe ser sincera y humilde porque ésto libera al donador de establecer lazos kármicos con el que recibe la dádiva. En realidad no debe existir quién da ni quién recibe porque ambos simplemente comparten lo que es del Todo.


El sentido del Dar no debería ser limitado o destinado a los momentos de emergencias. Debería entenderse como un aspecto del libre fluir y del sostén auténtico, sobre todo de los movimientos, agrupaciones o Tareas Espirituales Evolutivas que asumieron el Deber de Distribuir Beneficios entre los que más lo necesitan. Porque la donación auténtica es un trabajo interno, una claridad interior que obedece al crecimiento de la consciencia.


No debería Doler Dar, pero Duele, por eso como dijo la Madre Teresa de Calcuta: " Hay que Dar hasta que Duela ". Ciertamente, que actúe la Gracia Divina, para que un día se llegue a la consciencia de que Dar sea un júbilo interno y mientras más se dé, mayor alegría cause al sujeto porque él sienta que se va liberando del egoísmo arraigado en los núcleos más profundos.


Por lo tanto la Plegaria es: "Que las personas aprendan a Dar lo que el otro verdaderamente necesita, observando lo que es menester. Que aprendan a Dar con Amor, como si fuera para ellos mismos, sacando de su propio plato, compartiendo lo que se tiene con miras a una abundancia más abarcante. Que aprendan a Dar tiempo, compañía, dedicación, esfuerzo, etc.


Éste es el secreto de una distribución más justa y éste es el secreto de la prosperidad.




"Que el Dar sea una constante en tu vida"

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